Válvula Ventrículoperitoneal

Detalles

La implantación de un sistema de derivación se lleva a cabo en quirófano bajo anestesia general.

Una vez colocada ésta permitirá extraer líquido cefalorraquídeo desde el cerebro hasta el abdomen para aliviar la presión generada en el cerebro por acúmulo de dicho líquido. Inicialmente se realiza una incisión en el cuero cabelludo y se perfora un pequeño agujero en el cráneo. A través de este orificio se canaliza el ventrículo cerebral con un catéter y se conecta a una válvula (habitualmente de presión programable). Acto seguido, se desliza un segundo catéter desde la válvula hasta el abdomen donde se alcanza el peritoneo que es la cavidad donde se alojará dicho catéter y que se absorberá el líquido cefalorraquídeo. El postoperatorio es habitualmente bien tolerado, con una estancia media de 1-2 días en el centro hospitalario.

Paciente portador de válvula de derivación ventrículoperitoneal

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